jueves, 25 de octubre de 2012

TransitANDO por Acapulco - La Quebrada!




La TV, para bien o para mal, siempre ha marcado una referencia para casi cualquier cosa en la vida de todos, sobretodo predominan aquellas que nos quedaron de los años de la niñez; y una de las que mas quedó en mí, fue ver como tantos programas que transmitía la televisión venezolana entre los años 80 y 90, entiéndase novelas y series de producción mexicana, visitaban la bahía de Acapulco en sus temporadas vacacionales.

 Así recuerdo a Cantinflas, El Chavo, El Chapulín, Chispita y tantas otras series y novelas aztecas que subían raiting entre los lujosos hoteles de esa bahía y uno de este lado de la pantalla y con la inocencia/ignorancia propia de la infancia, alucinaba con todas las aventuras de aquellos capítulos que entre lugares y paisajes hermosos hacían su tarea de marketing como solo la TV sabe hacerlo; de esta forma me hice las primeras referencias acerca de México y pues claro de Acapulco como tal, pasé a formar en mi subconsciente infantil una idea de que “playa” y “diversión” eran lo mismo que decir “Acapulco”.

Ahora de adulto, y junto a mi esposa, que en aquel momento era mi novia, me encontré un día escogiendo para dónde irnos de vacaciones y entre ofertas y buenos paquetes turísticos recordé aquellos días en que me preguntaba frente a la TV por qué mis papás no me llevaban de vacaciones a Acapulco. Que injusticia! Jaja. Si bien es cierto que  todo el mundo sabe que ahora la cosa está buena es en Cancún, por algo tiene que ser que aquella Pandilla de Hollywood (The Hollywood Gang) decidió comprarse aquel hotel en Acapulco y no en otra bahía; al fin y al cabo Elvis no le cantó a Cancún sino a Acapulco. (indistintamente de que las razones estén mas que claras).

 Así convencí a mi novia que fuésemos a ver con nuestros propios ojos cómo era que esos carajos se lanzaban de aquel acantilado cual si fuesen pelícanos y no les pasaba nada a pesar de la poca profundidad. Compramos un paquete genial que nos permitió conocer el DF en una buena medida (bastante bien para empezar) y que nos dio chance de hacer un paseo muy bonito desde la capital mexicana hasta el propio Acapulco, con escalas en Cuernavaca y Taxco, este último, un lugar que merece una redacción aparte. Pero a este punto debo confesar que lo que me tenía con mayores expectativas era el destino que inspira esta edición, quizás por ser el último, quizás por todos los comentarios que tantos me dijeron sobre mi error de escoger este destino… o quizás porque realmente estaba muy contento de conocer este lugar y comprobar si era tan divertido como me lo pintó Televisa!

Acapulco es una ciudad que desde el primer momento que llegas se le siente que fue famosa, icónica, un “boom” ps, por resumirlo con una sola expresión. Es la típica ciudad latinoamericana, con pobreza claramente identificable en sus afueras, muchas zonas marginales que desaparecen como por arte de magia una vez que el carro hace un viraje (recuerden que yo llegué por carretera); entras de tiro al Acapulco Tradicional, como ellos le llaman a la zona que marcó la hora por tantos años y a la que justo yo quería ir. Nos quedamos en un hotel que mantenía esa sensación de que estábamos de visita en el Acapulco de los 50`s – 60`s, lujoso y muy bien mantenido pero como quedado en el pasado con decoraciones y estilos de los que ya poco se ven… y lo mejor en una habitación con balcón y vista a la inigualable bahía de las Playa Caleta y Caletilla. Mas naa`!

El espacio de la ciudad donde uno se moviliza está lleno de esculturas y murales que dan fé del derroché que vivió en su mejor momento, obvio hoy día todas las cadenas de hoteles mas importantes del mundo están ahí en la Av. Costera Miguel Alemán, lo mismo que los mas populares iconos del consumismo moderno… todos ahí a lo largo de una misma avenida para hacer un equilibrio perfecto entre el pasado y el presente! Créanme que perfecto!  

Los mexicanos en general son especialmente regionalistas, claro que tienen por qué, pero los de Acapulco, son los mejores… todos los botones, taxistas, mesoneros y afines tienen una historia que contarte sobre su terruño, todos han experimentado situaciones con estrellas y momentos grandes de Acapulco así estemos hablando de un guey de 20 años…jejeje. Si, todos te dirán que Rambo se grabó allá y que no importa cuánto terreno haya ganado Cancún, que lo mejor es Acapulco, sobretodo porque fue primero.

La experiencia de visitar Acapulco no puede terminar sin antes visitar La Quebrada, y este reportaje claro que tampoco. Recuerdan que fue así como convencí a mi esposa? Nosotros llegamos al show de los saltos con un servicio de estos que te buscan al hotel, en general esta ciudad no cuenta con medios de transporte masivo (mas allá que autobuses) así que lo mas apropiado es ir en taxi; así hicimos, recuerdo que rodamos muy poco desde el hotel, la van se detuvo en una avenida llena de buses turísticos en espera… y a pie terminamos de llegar  a lo que es como la entrada de un boulevard o algo así, el servicio que contratamos tenía incluido el ticket de entrada pero de haber ido por nuestra cuenta tocaba pagar antes de pasar. El lugar es como una especie de plaza, con algunos kioscos con ventas de alimentos, bebidas y souvenirs… para ver el espectáculo debes bajar la colina y situarte en una especie de terraza gigante que da justo al frente del risco en cuestión. Los turistas que mas pagan, tienen acceso a un restaurant mirador, que esta incrustado en el propio acantilado y forma parte de un hotel (Hotel Mirador) que está en el lugar donde puedes reservar una mesa al aire libre, colocada tipo tribuna para ver el espectáculo desde otra visual, quizás mas apropiada (todo depende del espectador) a la vez que te sirven comidas y bebidas de clase!... Los que no tenemos clase y de vaina fuimos a clases, tenemos alcance a la terraza de la que antes les hablé, donde te puedes comprar tu cerveza y lanzar también tus fotos (en obturación muuuy rápida); solo debes preocuparte por agarrar tu puesto con tiempo, pues de otro forma, te puede tocar un alto adelante, sin embargo, de verdad el perímetro para apreciar el show es bastante largo como para dar espacio a muchas personas. Los saltos se dán en unos horarios específicos, así que toca ir al momento que vale la pena. Nosotros fuimos en el turno de medio día, mucho sol caliente y picante acompañaba la función. El resto de los turnos de clavados entiendo que son de noche.

Tal y como las referencias me lo habían hecho saber, estos tipos te hacen creer que tienen alas, su movimiento es artístico mas que deportivo y quizás después que hayas visto unos 10 saltos es que te logres convencer de que no se mataron al caer. Los brincos se hacen desde distintas alturas, y en algunas ocasiones se lanza un solo clavadista, en otras lo hacen varios en secuencia, puede ser que también caigan haciendo una especie de coreografía y claro que para el final y como en todo show, es la caída libre desde lo mas alto, con mas tirabuzones, con mas agua salpicando y con mas de todo! Al mejor estilo latino, un virgen (Guadalupe), ubicada en un puesto protagónico de la base de lanzamientos vela por la integridad de todos estos muchachos, quienes al final de la jornada harán acto de presencia en la terraza donde estás tu para escuchar los aplausos nuevamente, fotografiarse contigo y recibir, claro está, la propina que a bien tengas para dejarle.

Para quienes vivimos en Venezuela y conocemos el Parque Nacional Mochima o el Archipiélago de Los Roques es difícil quedar sorprendido por alguna playa (espero que Bora Bora algún día me calle la boca), Acapulco como playa no logró mayor impacto pero claro que se pasa un día buenísimo junto a las olas de este mar, y la visual desde la orilla es quizás su mayor valor. Al mejor estilo de Playa El Agua o Playa Colorada quizás (VEN), aquí consigues todo tipo de vendedor ambulante, y de servicios de entretenimiento, entretenimiento que si tu decides no te faltará.

Transitando Acapulco, estuve disfrutando.









1 comentario:

  1. LAS FOTOS SON ESTUPENDAS , LITERALMENTE ENCANTADORA TU REDACCIÓN BASTANTE CONVINCENTE , DE MÉXICO SEGUIRÁ ESTANDO EN MI LISTA DF, GUADALAJARA ,Y ALGUNA OTRA QUE SE ME CRUCE POR ALLÍ ,ACAPULCO NO IRÉ,Y BORA BORA ES MI SUEÑO INCOMPARABLE CON NINGÚN LUGAR.......LOS ROQUES MI PARAÍSO PERSONAL ,LO DEMÁS QUE NOMBRASTE ,MI TIERRA MARAVILLOSA ......

    ResponderEliminar